
“La Santa Misa es el centro de mi vida y de toda mi jornada."

“Los monaguillos saben que es el mismo Señor quien les habla interiormente. Vale para el acólito (el monaguillo) lo que San Jerónimo decía de un joven discípulo suyo: “A través de la diaria lectura y meditación de la Escritura, ha hecho de su corazón una biblioteca de Cristo”


“Yo no quiero que se profane la Eucaristía, y estoy dispuesto a morir antes que eso suceda.”
-San Tarsicio (patrón de los monaguillos)

¡Los monaguillos somos amigos del Papa!
“Tened una forma de actuar que se corresponda con las cosas santas que tratáis, y un comportamieto externo e interno, al realizar vuestro servicio: cuando estáis en el altar, cuando hacéis la señal de la cruz y la genuflexión, cuando estáis sentados o moviéndoos, cuando tomáis parte en la oración y en el canto.”



“Los acólitos deberían conocer la Biblia de una manera especial.”


El Santo Padre nos habla de San Tarsicio, patrón de los monaguillos. Puedes leer toda su historia en la revista, HM Zoom +.
Ese muchacho parecía demasiado joven para un servicio tan arduo.
´Mi juventud - dijo Tarsicio - será la mejor protección para la Eucaristía.´
El sacerdote, convencido, le confió aquel Pan precioso, diciéndole:
‘Tarsicio, recuerda que a tus débiles cuidados se encomienda un tesoro celestial. Evita los caminos frecuentados y no olvides que las cosas santas no deben ser arrojadas a los perros, ni las perlas a los cerdos. ¿Guardarás con fidelidad y seguridad los Sagrados Misterios?
‘Moriré – respondió Tarsicio – antes que cederlos.’
“Yo no quiero que se profane la Eucaristía, y estoy dispuesto a morir antes que eso suceda.”
-San Tarsicio (patrón de los monaguillos)

volver


“Yo no quiero que se profane la Eucaristía, y estoy dispuesto a morir antes que eso suceda.”
-San Tarsicio (patrón de los monaguillos)







El Santo Padre nos habla de San Tarsicio, patrón de los monaguillos. Puedes leer toda su historia en la revista, HM Zoom +.
Ese muchacho parecía demasiado joven para un servicio tan arduo.
´Mi juventud - dijo Tarsicio - será la mejor protección para la Eucaristía.´
El sacerdote, convencido, le confió aquel Pan precioso, diciéndole:
‘Moriré – respondió Tarsicio – antes que cederlos.’
“Yo no quiero que se profane la Eucaristía, y estoy dispuesto a morir antes que eso suceda.”

volver